La boda de Britney Spears y Sam Asghari está dando mucho de qué hablar. Si la celebración ya fue peculiar de por sí, contando incluso con la detención de su exmarido, Jason Alexander, por intentarse colar en el evento, no paran de salir más detalles de este enlace.
La llegada de la cantante en un carruaje al más puro estilo Cenicienta y el detalle del zapato de cristal que publicó posteriormente en sus redes sociales, fueron dos de los elementos que más destacaron.
Pero tras ellos, ha salido a la luz el detalle que, hasta el momento, es el que más sorprendido ha dejado a sus seguidores. La intérprete de Baby One More Time llevó un tanga de diamantes como prenda de ropa interior.
Así lo ha dejado ver, sin querer, en los vídeos que ha compartido de la fiesta en su perfil de Instagram. La compositora llevaba un vestido negro tipo esmoquin (también de Versace) para esta parte de la noche. Al ser corto por detrás y al realizar movimientos extravagantes a la hora de bailar, no era complicado que la parte trasera de su cuerpo se viese.
Eso sí, para Britney esto no ha sido un impedimento, y ha querido dejárselo claro a sus fans: "No os preocupéis, llevaba mi primer tanga de diamante debajo de la chaqueta. Espero no haber ofendido a nadie", ha explicado.